Llega esta época del año [mentira, me agarró la fiebre allá por principios de diciembre] y repaso la lista de “cosas por hacer” sabiendo que muchas quedarán sin hacer pero “esta, ESTA” no pasa al año siguiente. Asi es como de repente encontré tiempo para sacarle la pintura a las puertas de un placard [pintarlas quedará para… ya saben]. O pegar corcho en paredes. O pintar cierta pared, etc.
O el caso de esta frazada que empezó con la idea de usar unos retazos chiquitos que quedaron de otras cosas. Retazos que terminaron formando círculos y flores aplicados a mano.
Como cuando la empecé no me animaba a quiltear telas grandes. La idea era hacer 4 mini quilts y luego unirlos con un bies tapando la unión. De ahi las líneas horizontales que se ven.
Quedó una frazada de 141cm x 229cm, ideal para una cama individual. Telas recicladas de antiguas sábanas. Creo que lo único nuevo que tiene es la guata… y el hilo. Está quilteada con la técnica de free motion quilting. El borde está terminado a mano. Y resistió un lavado en mi lavarropa sin desintegrarse!
Van dos años que el propósito de coser un quilt por mes queda en promesa. Como no hay dos sin tres esperemos que el 2016 sea “el” año que hicimos contacto… que cosimos 12 quilts. 🙂
Es hermosísimo.